lunes, 14 de mayo de 2012

Distorsión en primera plana.

 

Distorsión en primera plana

por Gabriela Mejía Cruz.

Para comenzar quisiera decir que en la mayoría de los medios de comunicación, se tiene un alto estrés por el dilema que representa el qué se debe tener como prioridad, si el propósito del comunicólogo de informar de manera clara, concisa y sobretodo verídica,  o este asunto que tanto influye en la presentación de la información, el “monstro” del rating.

En más de una ocasión hemos podido observar como algún medio exagera brutalmente un acontecimiento al grado de mentir u omitir detalles con tal de causar paranoia en la sociedad, todo esto con la finalidad de que su información “venda” más que la de otros medios.

De este hecho son culpables tanto medios como sociedad, pues se  entra en un círculo vicioso, en el que si los medios presentan difamaciones están haciendo mal y se arriesgan a ser juzgados, pero si presentan la información sin ningún tipo de alteración, a veces los receptores la catalogan de aburrida. Por esto los medios optan por “Darle al pueblo lo que pide”; claro que para nada justifica sus acciones.

En muchas ocasiones, distintos medios de comunicación han quebrantado varios puntos expuestos en el MEPC al hacer hasta lo imposible por conseguir la nota, o más que lo imposible lo intolerable; al meterse en la vida privada de las personas, publicando intimidades que nada tienen que ver con su desempeño en el puesto público que desempeñan.

Un ejemplo de cómo se exagera la información es el caso el error de los autores de libros del candidato a la presidencia Enrique Peña Nieto. Pues, si bien es cierto que el hecho evidencía el grado de conocimientos culturales del candidato, los medios de comunicación se han encargado de que este error tenga una mayor trascendencia, y lo vinculan a cualquier acción de EPN, se burlan y lo tachan de total ignorante, cuando ciertamente no se puede juzgar de esta manera a ninguna persona por tal error.

Otro caso de cómo algunos periodistas le dan mayor importancia al rating, es el de los aretes con un costo de entre 40,000 y 60,000 pesos de la candidata Josefina Vázquez Mota, donde con tal de vender la idea de lo carísimos que son dichos artículos se pierde lo que debería ser la idea central de la noticia de investigar e informar si realmente estos fueron comprados con presupuesto perteneciente a la educación mexicana.

En la universidad nos enseñan la estructura correcta de presentar la información pero lo que vemos en la realidad es algo muy diferente. Las notas periodísticas están cargadas en exceso de subjetividad. La mayoría de los medios prefieren entretener con chisme que educar con información verídica. Pues, tal vez la información no sea cierta, tal vez tenga uno que otro chisme o rumor inventado por los testigos o por el mismo periodista cobijado con el nombre del famoso “anónimo” o tal vez lejos de informar de manera clara y concisa, solo traerá más confusión al receptor,  ¡ah pero eso sí!, seguro estará en primera plana…

 

 

 

 

 

 

0 comentarios:

Publicar un comentario

Acerca del blog

Información de la clase de ética de la comunicacion y los medios.

Blog Archive